Chuletón de Vaca: La joya de la carne roja
Pocas carnes despiertan tanta admiración como un auténtico chuletón de vaca madurada. Seleccionamos piezas de vacas adultas, de entre 5 y 8 años de edad, criadas en libertad y alimentadas a base de pastos naturales y cereales, lo que aporta a la carne un sabor profundo y una grasa infiltrada que marca la diferencia.
Cada chuletón pasa por un proceso de maduración en cámara que puede durar entre 30 y 45 días, bajo condiciones estrictamente controladas de temperatura y humedad. Este reposo permite que la carne gane ternura, potencia su sabor y concentre todos sus jugos.
Color rojo intenso, textura firme y grasa amarilla: señales claras de una carne bien madurada y de alta calidad.
La grasa infiltrada (el marmoleado) se funde en la cocción, aportando jugosidad y ese sabor tan característico que solo tiene un buen chuletón de vaca.
¿Cómo asar un chuletón perfecto?
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Temperatura ambiente: saca el chuletón del frigorífico 1 hora antes.
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Grosor ideal: entre 4 y 5 cm. Una buena chuleta necesita su espacio.
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Fuego fuerte: sella la carne 3 a 5 minutos por cada lado, hasta lograr una costra tostada.
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Echa la sal después de sellar: abundante sal gruesa, que la propia carne absorberá según necesite.
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El punto ideal:
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Exterior bien tostado
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Capa interior de medio centímetro gris
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Centro rojo vivo y jugoso
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